lunes, 7 de octubre de 2013

Mas allá de las canas

Tendemos a pensar que llegar a la vejez puede ser una especie de fin, pero de hecho
otras personas lo ven como una oportunidad para tener una vida plena, realizarse y utilizar su tiempo de una forma útil y válida, en un ejemplo de fortaleza y sabiduría.

Incluso no dejan de cultivar su mente constantemente en busca de un enriquecimiento cultural y se integran en la sociedad de una forma muy natural. En resumen: Vida plena y feliz.
... A veces la misma sociedad en la que vivimos, pone trabas a los jubilados, un grupo social tan válido e importarte como cualquier otro, en los últimos años la persona mayor ha ido, perdiendo ese derecho al respeto, de verlas como personas entrañables y tiernas para pasar a ser en ocasiones ignorada, desplazada, aisladas en cierta manera.

Debemos pensar que llegar a la tercera edad o ser mayor, es la culminación de toda una vida, después de haber luchado constantemente y de forma continua para satisfacer nuestras necesidades y procurar nuestro bienestar y el de nuestra familia, los que son mayores fueron hijos, luego padres y ahora son abuelos. Pues ahora, les toca a éstos, después de haber recorrido un largo camino, tomarse un descanso obligado y recapacitar y disfrutar de todo lo obtenido durante su largo recorrido por la vida. Y esto no quiere decir que no puedan realizar nuevos proyectos con los cuales puedan realizarse intelectual, espiritual y socialmente.
Tampoco la vejez es sinónimo de enfermedad, existen personas mayores con salud y fortaleza envidiables, mientras existen jóvenes enfermos. Sólo es necesario estar preparados y tomar conciencia para la vejez.
Crear un nuevo programa de vida, pensado en aprovechar todo lo que el futuro nos puede ofrecer, no echar de menos el pasado, sino asumir la nueva situación y sacarle provecho.


Escrito por:
Elsa Villar

No hay comentarios:

Publicar un comentario